Esta es una receta de aprovechamiento. Tenía un poco de carne picada que me había sobrado de preparar unos espaguetis y dos lonchas de jamón que ya decían "o me comes o me tiras", así que con unas setas que también andaban perdidas por el frigorifíco y dos calabacines que no eran de ninguna sobra preparé esta receta que quedó muy sabrosa.
INGREDIENTES:
Para 2 personas
Para 2 personas
2 calabacines pequeños
100 gramos de carne picada
100 gramos de setas
1 cucharada sopera de salsa de tomate
1 cebolleta
1 diente de ajo
2 lonchas de jamón
sal
pimienta negra molida
aceite de oliva virgen extra
PREPARACIÓN:
Ponemos en una sartén un poco de aceite a calentar, picamos la cebolleta y el diente de ajo muy pequeño y ponemos a freír a fuego medio (en una vitrocerámica que tenga hasta el 9, en el 6). Mientras, limpiamos las setas y cortamos en taquitos. Ya tendremos la cebolla transparente, ponemos las setas y dejamos que suelten toda su agua. Lavamos y secamos los calabacines. Con ayuda de una cucharilla o un
sacabolas retiramos su carne con cuidado de no estropear la piel. Echamos la carne del calabacín en la sartén y revolvemos de vez en cuando para que se haga. Cuando esté blando subimos el fuego y echamos la carne para que se haga rapidamente. Volvemos a poner el fuego al 6, añadimos la cucharada de salsa de tomate y salpimentamos. Revolvemos y retiramos del fuego. Ponemos el jamón cortado en trozos no muy pequeños y mezclamos todo.
Precalentamos el horno a 180º. En una fuente colocamos las barcas de calabacín y rellenamos con el refrito que hemos preparado.
Ponemos la fuente en el horno y dejamos 10 minutos. Es un plato que se puede hacer con antelación y dejar el momento de horno para cuando vayamos a consumirlo. Servir bien caliente.