Podemos hacer más fácil cocinar si aprovechamos una tarde lluviosa para hacer salsas y acompañamientos que solemos utilizar en muchas recetas. Yo, suelo hacer, entre otras cosas, champiñones encebollados porque es algo que acompaña bien platos como arroz, revueltos, etc.
INGREDIENTES:
250 gramos de champiñones
100 gramos de cebolla
1 diente de ajo
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta negra molida
En una sartén ponemos aceite a calentar. Lo justo para cubrir el fondo. Picamos la cebolla y el ajo muy menudo y lo echamos en la sartén. Salamos y dejamos que se haga a fuego medio-bajo. Si vuestra cocina tiene hasta el 9 de potencia, en el número 5. Mientras, lavamos bien los champiñones y los vamos cortando en láminas. De vez en cuando revolvemos la cebolla para que se haga uniformemente. Cuando terminemos de limpiar los champiñones ya tendremos la cebolla transparente. Echamos los champiñones sobre la cebolla, salpimentamos, revolvemos y dejamos que se haga todo junto 15 minutos. Con este tiempo suelen quedar bien hechos pero es mejor probar uno y ver si están a nuestro gusto.
En caliente los ponemos en botes de cristal pequeños, llenamos hasta el borde, tapamos y dejamos el bote hacía abajo, hasta que los champiñones estén completamente fríos. Los pondremos en el frigorífico y ya tendremos un ingrediente preparado para hacer alguna receta. Se conservan perfectamente 15 días.